En la capital de Antioquia se pierden cinco billones de pesos en corrupción, cerca del 22 por ciento de lo que se pierde en Colombia por este delito.
La corrupción es sin duda uno de los factores más impactantes y cuestionadores en la realidad política local, nacional e internacional. Y aunque es un fenómeno que se presenta desde hace más de doscientos años, solo hasta ahora está ganando fuerza.
El caso del exsecretario de Infraestructura Física de Medellín, José Diego Gallo, es actualmente uno de los escándalos políticos locales más relevantes. A este no solo se le ha hecho un cubrimiento exhaustivo de parte de los medios, sino que también podría representar intereses secundarios tras causar el ‘tsunami político-medial’ que se ha formado, y al que por ende le hace falta más estudio.
Dicho caso, podría analizarse fácilmente en tres momentos: el antes, el durante, y el después de su investigación respecto a el avalúo de predios que iban a adquirirse en el sector occidental de Medellín, aun cuando los proyectos que están en desarrollo (El Cinturón Verde y el Jardín Circunvalar ) se encuentran en la zona oriental de la ciudad.
“Hace dos meses que salí de la Administración y ya me están acusando con cosas que no tuve que ver. Y con algo muy grave que es la compra de predios que viene de la administración de Alonso Salazar”, afirmó Gallo a W Radio en defensa de tal acusación.
Jaime Rafael Nieto López, sociólogo y docente de la Universidad de Antioquia, afirma que aunque considera que el caso del exsecretario Gallo puede pasar a segundo plano ahora que se acerca la temporada electoral, mucho tiene que ver lo uno con lo otro. Explica que el permanente cubrimiento que se le ha dado al caso puede entenderse también como ‘marketing político’ de algunas campañas.
Del mismo modo, Luis Guillermo Patiño Aristizabal, director de la Escuela de Derecho y Ciencias Políticas en la Universidad Pontificia Bolivariana (UPB), afirma estar de acuerdo con la destitución de Gallo quien, a petición del Alcalde de Medellín Aníbal Gaviria, dejó su cargo el 6 de diciembre de 2013.
Sin embargo, vale la pena darle una mirada al pasado de Gallo, pues en los últimos días se ha conocido que su administración en el municipio de Envigado, en el periodo 2008-2011, estuvo salpicada de presuntas irregularidades.
Ante estos cuestionamientos, el alcalde Aníbal Gaviria ha dicho a medios: “No nombro gente porque me la recomienden, menos en cargos de esa responsabilidad. Trabajó en la doble calzada Bello Hatillo, en el final de la Gobernación de Eugenio Prieto y presentó un ejercicio adecuado. Al inicio de nuestra Gobernación continuó en esa área en un tema de ingeniería y de allí sale al Concejo de Envigado. Luego gana la Alcaldía de Envigado. No sé qué procesos o condenas tenga, por el contrario, la información que tengo es de una Alcaldía que se ejecutó de normalmente para arriba. Fue uno de los finalistas en su categoría en Colombia Líder. Con esos pergaminos, lo nombro”.
Marco Fidel Agudelo Cano, docente a cargo del semillero de Gobierno y corrupción de la Universidad de Antioquia y perteneciente al estudio de corrupción en Colombia “Transparencia”, dice que sus investigaciones han revelado que más de veintitrés billones de pesos se pierden cada año en corrupción en el país, de los cuales cinco billones corresponden a Medellín.
¿Dónde estamos fallando entonces? ¿Qué entiende la opinión pública por corrupción? y ¿qué hacemos para contrarrestarla?
*Este artículo fue publicado en el sistema informativo De La Urbe en el curso de Periodismo Político del Pregrado en Periodismo de la Universidad de Antioquia, a cargo del profesor Gonzalo Medina.