Carta al Comandante

Estará pensando entonces que adónde quiero llegar, que usted no es mi amigo y verá si quiere marcharse o morirse. Ya sé que no le importa en absoluto pero, si sigue leyendo, tenía una única pregunta:

Vértigo

Algunas veces cuesta aceptar, que la palabra Bien.ven.ido no es un saludo sino una despedida y que el vértigo que produce aceptarlo es más que el miedo al vacío que te espera, sino las ganas de caer en él.

Reflejos

Faulkner decía que si reencarnaba le gustaría vivir como un Zopilote. Cuánto aburrimiento, \”nadie lo odia ni lo envidia ni lo quiere ni lo necesita. Nadie se mete con él, nunca está en peligro y puede comer cualquier cosa\”.

La simpatía, la indiferencia, el disgusto

Un lugar desconocido para perderse. Una persona querida, una detestada, una sonrisa, una palabra, un apretón de manos, un encuentro sorpresivo con los miedos. Despertar, si acaso el ritual más hermoso y deseado es entre tantas cosas, ver la luz… lo que implica primero haber conocido la oscuridad.