Un lugar desconocido para perderse. Una persona querida, una detestada, una sonrisa, una palabra, un apretón de manos, un encuentro sorpresivo con los miedos. Despertar, si acaso el ritual más hermoso y deseado es entre tantas cosas, ver la luz… lo que implica primero haber conocido la oscuridad.
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Malditos sean los números
Que un número no era más que un número y no podría ser una radiografía del laberinto humano y pues, me comí el cuento yo solita. Me la creí.
Relatos de un militar
A menudo me pregunto por las connotaciones que puede tener esa expresión y trato de recordar lo que significa ser hija de un militar, haber vivido en un batallón y tener a mis caprichos de princesa la disposición de todos los subalternos de mi padre. Pero no logro recordar nada de eso.